¡Adiós, Venezuela!
Sentado, tranquilo, tomándome un trago de Vodka,
¡me levanté! Y supe que no era de aquí;
Seca se quedó mi boca,
Y sólo dije: “¡Adiós, Venezuela!”.
Creí que me estaba volviendo loco,
que por momentos, había perdido el foco,
pero por primera vez vi el horizonte,
y mi futuro vi, allá, en el norte…
Y sólo dije: “¡Adiós, Venezuela!”.
Me volví a sentar, con otro nuevo trago,
diciendo: “¡de aquí, me largo!”…
No estoy borracho; al fin vi la realidad.
Lo siento, sobrinos, lo siento, mamá…
¡Adiós, Venezuela!
¡Adiós, Venezuela!
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"Todo lo que está a la vista es publicable"
EL LITERATO
…Donde todo fluye
Exclusivo de: @FrankNessi
Contacto directo: Twitter: @FrankNessi / Facebook: Frank Contreras Nessi / Instagram: franknessi / Skype: escalpelofnc
°¡Adiós Venezuela!°
Mucho más que leer, conocer y sentir
Edición N° 239
¿Alguna vez pensaste irte de Venezuela? Yo, sinceramente, no, sin embargo, me veo en el aeropuerto, con dos maletas nada más, y ser feliz por fin en mi vida. Este especial va dirigido a aquellas personas que a todo pulmón aman su gentilicio, mas, no se trata de nacionalidad, sino dónde creas pertenecer en realidad, donde te sientas a gusto y realmente vivo… Va más allá de tu razón.
¡Adiós, Venezuela!
SECCIONES:
- Vernissage
- REFLECTIONS BY THE TEA
- Peristilo sórdido
- Vuelco de Broza
- … Y como dirían en mi villorrio
VERNISSAGE
Antes de comenzar el tema de este semanario, quiso expresarme libremente acerca de un tema, y es que quise hacer una investigación de campo de aquellas personas que utilizan el Twitter para divertirse de una forma diferente, con espontaneidad y sin tabúes. Como no suelo esconder nada, utilicé mi cuenta, ¿para qué crear una ficticia? Pongo mi cara donde debo, no un pene de avatar para que vean mis 22 centímetros de largo, ¡ups! ¿Sabes por dónde viene la cosa? Pues, agregué a varias personas de esta índole, entre ellas parejas y mujeres, a ver qué colocaban. Para mi sorpresa, el 100% de estos contactos no tienen rostro, son penes, vaginas y senos, penetraciones, mamadas y mucho más, como los SexParty y los hashtag cotidianos que crearon. Desde luego, como noción Swingers conocida, las fotos son editadas o tomadas del cuello para abajo (o la nariz, dependiendo de la gráfica), norma Sw impuesta por el BDSM hace muchos años atrás. Más allá de investigar, me preguntaba cómo podría existir tanta ociosidad, si era por sentirse muy sexual o más bien carecía de ella, es decir, que se precipitaban en colocar unos bellos senos en el avatar por cierta insatisfacción, o, por el contrario: “medio día sin sexo” y ya sentían desespero.
Agregué, como mencioné, contactos diversos, incluso, una chica cuyo fetiche es unísono al mío: los pies, mas, todo iba acrecentándose, porque no sólo era desnudez desmedida, sino unos #martesdetetas, #miercolesdenalgas y hasta #subetufotoautografiada, ni hablar de otros hashtag emblemáticos, como #viernesdeclitoris y funcionar de la misma manera, como: “este es mi aportes para el #martesdetetas, espero hagan RT y alcance los cuatro míl”, o, “ya alcanzamos los cuarenta mil seguidores”. A decir verdad, poco me importa que me sigan mil, por ejemplo, pues, de tanto bulto, sólo quedan las ganas. Lo curioso del caso es que aporté algunas caricaturas para los hashtag mencionados, siempre con respeto, pero si acaso unos 30 RT alcancé, aunque sí muchos seguidores. El punto es que las personas “normales” comenzaron a decirme que me destapé, que viendo mis Sweet o lo que llegaban de mis seguidores era muy sexual, que era obsceno y esa cantidad de personas que se hacen la cabeza un mundo y hasta pervertido me puedan llamar, como escoger a un contacto, femenino desde luego, y escribirle una estrofa, a fe de regalarle algo diferente, pero, ¡otra vez el pero! Se lanzan una que me la paso piropeando, que a veces sueno hasta de Don Juan, ¿y? Conociera yo en persona a quien pueda ofrecerle una inspiración poética. Si aporto a unas tetas, nalgas o piernas, no quiere decir que sea lascivo, si sigo o no a alguna pareja swingers, no quiere decir que lo sea, y si me diera la gana de twittear mi pene, lo hago, pero mostrando el rostro, no tengo problema, pero soy más que una cabeza de… ¡ánimos! Comprendo a las personas, sean como sean, vengan como vengan, no soy nadie para decir si está bien o mal, tampoco me importa si creen que soy un morboso por seguir a tales y cuales y mucho menos menos persona por no ser un “pene”, pero sí ser sin tabúes. La gente tiende a malinterpretar todo, más si es una red social, sea cual sea, pero hay que ser sinceros, ya los niveles de “sin oficio” llegaron muy alto en la tecnología. Como lo dije en uno de mis sweet: “el exceso de información, mata la comunicación”. Ahora todo es un RT, una cadena, un visto bueno, un “me gusta”, esa fe de comentar se perdió, y si lo hacen es para decir gafedades, como: “¡qué ricas tetas! ¿Te doy toda mi lechita caliente?”, y, para colmo, viene el tipo en cuestión con una foto penal, perdón, de su pene, ja, ja, ja. ¡Los hombres son cabezas, las mujeres, clítoris! En eso se convirtió ese clan, desde luego, supongo, se verán las caras a esos encuentros sexuales (#Sexparty), donde parejas, chicas solas y chicos solos hacen de las suyas, y terminan es colocando: “Sensualísima haciéndose cargo de Penetrador, y mi mujer al rico oral con FlaquitaSexual”, ¡uy! ¿Dónde dejamos la intimidad? Por allá se la llevó bien lejos el morbo, con él, desde luego, y dejó sólo corazones abandonados, de los que creemos en sentir a una mujer de verdad, toda la piel, poro a poro, una penetración suave, sentida, y, desde luego, explotar a lo salvaje cuando se quiere, decir lo que todos dicen, en casos especiales, como: “¡me lo mamas rico! ¿Te gusta como te cojo?”, ojo, sólo casos excepcionales, para poner chispa, pero no todo el tiempo como suele ser lo básico, como exagerar gemidos, gritar como locos, poner cara retorcida como si más bien te apretaran con destornillador, y, ¿para qué? Luego viene una dulce chica y dice: “sí, entiendo, pero es que yo busco es a un hombre jocoso, activo, pícaro”. En pocas palabras, quiere es a un tipo que todo el tiempo ande diciéndole que quiere tirar, que la excite, que ande es tocándole los senos, cual mango aguado, que le meta los deditos y le hable morboso, ¡es eso a lo que llegaron! Yo, sinceramente, no soy así, y me enorgullezco por lo que soy, no me considero mejor o peor hombre que otro, tampoco digo que lo básico esté mal, ¡así es la sociedad! Vivo de ella, vivo en ella, tampoco es que soy extraterrestre, pero prefiero vivir una sexualidad activa coherente, sentida, explosiva, como dicen muchos, pero al margen de la conciencia, no divulgándola en hashtag, pues, no me hace falta que comenten cómo me lo mamó la negra, cómo penetré anal a la bella flaca o que estoy solo con la pija hasta el techo, ¿para qué? Prefiero ver Venus en mi página de Internet, en dado caso, hacer una caricatura excitante, chatear con alguna que otra pareja o mujer por sus deseos desenfrenados, y, al cabo de cuarenta minutos, conversan hasta de su niño cuando lo llevó al parque. Es eso, compañeros escritos, que constantemente pensamos en sexo, así estemos en el trabajo, vemos nuestro celular y nos apetece alguna foto, queremos llegar a casa a tirar, si tenemos pareja, de paso que nos espera apetitosamente, y, ¿cómo pasamos la noche? Con calor, pero por el clima, sudados, porque se fue la luz, y así, día a día, despertamos, porque no somos de listón, sino de carne, porque un roce nos erecta, porque una boca sensual nos deleita para un posible sexo oral completo, porque esta vida se hizo para vivirla, sólo que debería medirse este tipo de apetitos, no porque quiera dármelas de santo, sino porque se hizo un Mundo Paralelo, porque los jóvenes copian este modo de supervivencia, y, es lamentable, porque, si a ver vamos, cuando tenía 19 años pensaba en ese amor etéreo, en la conquista, en un romance sabroso, de detalles sinuosos, pero ahora queda es un pene, una vagina, parejas adolescentes con este Modo de Vida, y, no me duele, pero sí me entristece que al cabo de los años, agregado al embarazo precoz, enfermedades venéreas y hasta el estado psicológico de muchas personas, se echan a la basura, simple y llanamente porque el sexo es, o era, el complemento de una relación de pareja, porque la intimidad era cuestión de dos, y ahora el complemento del amor se convirtió en confiar en tu pareja, pero para tener sexo con un tercero y un cuarto, porque el complemento de esta médula dúctil que se convirtió la sociedad se redujo a un simple hashtag sexual, y la conciencia al infierno donde no volverá, sólo crecerán cuales ramas, o hiedra, en nuestra sociedad inverosímil.
Nota: Tengo muchos hastag, pero para ello ideé varias etiquetas, donde podrás tener imágenes, noticias, actualizaciones, de acuerdo al tema, ya que son más de 5.000 fotos que he añadido, además de la gama de seguidores, que supera los nueve mil. Lo esencial es saber buscar, con #MisHashtag sabrás qué etiquetas utilizo y para qué, como #CaricaturasFrankNessi y #KrikFra la más actual y la antigua, donde regalo Caricaturas a mis seguidores, como a personalidades; promuevo esa esencia de recomendar con #TributoAMisSeguidores también subo imágenes de Contraportadas, con todo el debido respeto y mención con #EntreCuerpos además de fotos curiosas, noticiosas o relevantes con #LaFotoVeraz igualmente sucede con #ElVideoVeraz y si se trata de mis fotos personales, no hay que pensar mucho, con mi nombre tienen #FrankNessi y anuncios de mi página o cualquier otra información de valía, está #El_Literato Son muchos los que utilizo, son muchos ganadores a través de mi Twitter, les agradezco mucho a tantos seguidores, a tanta gente que me quiere como soy, sin tabúes, pero con conciencia, ¡muchas gracias!
Al meollo, sin rollo:
Agregué, como mencioné, contactos diversos, incluso, una chica cuyo fetiche es unísono al mío: los pies, mas, todo iba acrecentándose, porque no sólo era desnudez desmedida, sino unos #martesdetetas, #miercolesdenalgas y hasta #subetufotoautografiada, ni hablar de otros hashtag emblemáticos, como #viernesdeclitoris y funcionar de la misma manera, como: “este es mi aportes para el #martesdetetas, espero hagan RT y alcance los cuatro míl”, o, “ya alcanzamos los cuarenta mil seguidores”. A decir verdad, poco me importa que me sigan mil, por ejemplo, pues, de tanto bulto, sólo quedan las ganas. Lo curioso del caso es que aporté algunas caricaturas para los hashtag mencionados, siempre con respeto, pero si acaso unos 30 RT alcancé, aunque sí muchos seguidores. El punto es que las personas “normales” comenzaron a decirme que me destapé, que viendo mis Sweet o lo que llegaban de mis seguidores era muy sexual, que era obsceno y esa cantidad de personas que se hacen la cabeza un mundo y hasta pervertido me puedan llamar, como escoger a un contacto, femenino desde luego, y escribirle una estrofa, a fe de regalarle algo diferente, pero, ¡otra vez el pero! Se lanzan una que me la paso piropeando, que a veces sueno hasta de Don Juan, ¿y? Conociera yo en persona a quien pueda ofrecerle una inspiración poética. Si aporto a unas tetas, nalgas o piernas, no quiere decir que sea lascivo, si sigo o no a alguna pareja swingers, no quiere decir que lo sea, y si me diera la gana de twittear mi pene, lo hago, pero mostrando el rostro, no tengo problema, pero soy más que una cabeza de… ¡ánimos! Comprendo a las personas, sean como sean, vengan como vengan, no soy nadie para decir si está bien o mal, tampoco me importa si creen que soy un morboso por seguir a tales y cuales y mucho menos menos persona por no ser un “pene”, pero sí ser sin tabúes. La gente tiende a malinterpretar todo, más si es una red social, sea cual sea, pero hay que ser sinceros, ya los niveles de “sin oficio” llegaron muy alto en la tecnología. Como lo dije en uno de mis sweet: “el exceso de información, mata la comunicación”. Ahora todo es un RT, una cadena, un visto bueno, un “me gusta”, esa fe de comentar se perdió, y si lo hacen es para decir gafedades, como: “¡qué ricas tetas! ¿Te doy toda mi lechita caliente?”, y, para colmo, viene el tipo en cuestión con una foto penal, perdón, de su pene, ja, ja, ja. ¡Los hombres son cabezas, las mujeres, clítoris! En eso se convirtió ese clan, desde luego, supongo, se verán las caras a esos encuentros sexuales (#Sexparty), donde parejas, chicas solas y chicos solos hacen de las suyas, y terminan es colocando: “Sensualísima haciéndose cargo de Penetrador, y mi mujer al rico oral con FlaquitaSexual”, ¡uy! ¿Dónde dejamos la intimidad? Por allá se la llevó bien lejos el morbo, con él, desde luego, y dejó sólo corazones abandonados, de los que creemos en sentir a una mujer de verdad, toda la piel, poro a poro, una penetración suave, sentida, y, desde luego, explotar a lo salvaje cuando se quiere, decir lo que todos dicen, en casos especiales, como: “¡me lo mamas rico! ¿Te gusta como te cojo?”, ojo, sólo casos excepcionales, para poner chispa, pero no todo el tiempo como suele ser lo básico, como exagerar gemidos, gritar como locos, poner cara retorcida como si más bien te apretaran con destornillador, y, ¿para qué? Luego viene una dulce chica y dice: “sí, entiendo, pero es que yo busco es a un hombre jocoso, activo, pícaro”. En pocas palabras, quiere es a un tipo que todo el tiempo ande diciéndole que quiere tirar, que la excite, que ande es tocándole los senos, cual mango aguado, que le meta los deditos y le hable morboso, ¡es eso a lo que llegaron! Yo, sinceramente, no soy así, y me enorgullezco por lo que soy, no me considero mejor o peor hombre que otro, tampoco digo que lo básico esté mal, ¡así es la sociedad! Vivo de ella, vivo en ella, tampoco es que soy extraterrestre, pero prefiero vivir una sexualidad activa coherente, sentida, explosiva, como dicen muchos, pero al margen de la conciencia, no divulgándola en hashtag, pues, no me hace falta que comenten cómo me lo mamó la negra, cómo penetré anal a la bella flaca o que estoy solo con la pija hasta el techo, ¿para qué? Prefiero ver Venus en mi página de Internet, en dado caso, hacer una caricatura excitante, chatear con alguna que otra pareja o mujer por sus deseos desenfrenados, y, al cabo de cuarenta minutos, conversan hasta de su niño cuando lo llevó al parque. Es eso, compañeros escritos, que constantemente pensamos en sexo, así estemos en el trabajo, vemos nuestro celular y nos apetece alguna foto, queremos llegar a casa a tirar, si tenemos pareja, de paso que nos espera apetitosamente, y, ¿cómo pasamos la noche? Con calor, pero por el clima, sudados, porque se fue la luz, y así, día a día, despertamos, porque no somos de listón, sino de carne, porque un roce nos erecta, porque una boca sensual nos deleita para un posible sexo oral completo, porque esta vida se hizo para vivirla, sólo que debería medirse este tipo de apetitos, no porque quiera dármelas de santo, sino porque se hizo un Mundo Paralelo, porque los jóvenes copian este modo de supervivencia, y, es lamentable, porque, si a ver vamos, cuando tenía 19 años pensaba en ese amor etéreo, en la conquista, en un romance sabroso, de detalles sinuosos, pero ahora queda es un pene, una vagina, parejas adolescentes con este Modo de Vida, y, no me duele, pero sí me entristece que al cabo de los años, agregado al embarazo precoz, enfermedades venéreas y hasta el estado psicológico de muchas personas, se echan a la basura, simple y llanamente porque el sexo es, o era, el complemento de una relación de pareja, porque la intimidad era cuestión de dos, y ahora el complemento del amor se convirtió en confiar en tu pareja, pero para tener sexo con un tercero y un cuarto, porque el complemento de esta médula dúctil que se convirtió la sociedad se redujo a un simple hashtag sexual, y la conciencia al infierno donde no volverá, sólo crecerán cuales ramas, o hiedra, en nuestra sociedad inverosímil.
Nota: Tengo muchos hastag, pero para ello ideé varias etiquetas, donde podrás tener imágenes, noticias, actualizaciones, de acuerdo al tema, ya que son más de 5.000 fotos que he añadido, además de la gama de seguidores, que supera los nueve mil. Lo esencial es saber buscar, con #MisHashtag sabrás qué etiquetas utilizo y para qué, como #CaricaturasFrankNessi y #KrikFra la más actual y la antigua, donde regalo Caricaturas a mis seguidores, como a personalidades; promuevo esa esencia de recomendar con #TributoAMisSeguidores también subo imágenes de Contraportadas, con todo el debido respeto y mención con #EntreCuerpos además de fotos curiosas, noticiosas o relevantes con #LaFotoVeraz igualmente sucede con #ElVideoVeraz y si se trata de mis fotos personales, no hay que pensar mucho, con mi nombre tienen #FrankNessi y anuncios de mi página o cualquier otra información de valía, está #El_Literato Son muchos los que utilizo, son muchos ganadores a través de mi Twitter, les agradezco mucho a tantos seguidores, a tanta gente que me quiere como soy, sin tabúes, pero con conciencia, ¡muchas gracias!
Al meollo, sin rollo:
No nací a orillas del río Guaire, mucho menos en el río Orinoco, tampoco en Maracaibo y ni hablar de Caracas, ¡no! Nací en Valencia, cerca del parque Negra Hipólita, cuando Chávez estaba con un fusil en las Fuerzas Armadas, y no bolivarianas… Crecí en un lugar que jamás olvidaré, en el que siempre sueño, el que me motivó a escribir la historia de mi vida real, mas, tampoco es para que me ponga a llorar de la nostalgia, ¿o sí? Nunca creí que me convertiría en escritor, mucho menos en actor, director de teatro, y ni por las manzanas de Adán en periodista, pero pasaron los años, y en eso me convertí, además de ser consejero por 20 años y un semanario que hoy en día se llama El Literato, ¿qué vueltas da la vida, ¿verdad?
Nunca conocí la cultura Yanomami, y ahora aprenderé de la Colville, nunca me bañaré en el río Caroní, pero ahora me bañaré en el río oriental de Francia, nunca disfruté de la montaña, sino las dos casa de playa, pero ahora disfrutaré del ambiente del norte de Idazo, jamás me importó conocer otro país, y resulta que ya no siento que soy venezolano.
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Ciertamente, mi Cédula de Identidad indica que soy venezolano, pero, ¿acaso es preferible pasar por el proceso de naturalización, que quedarse en un país que se desmorona? ¿Con título, un techo, un “buen trabajo” (lo que implica una empresa reconocida), que llenarse de guáramos y alinearse al proceso de los inmigrantes? ¿Qué será mejor, seguir trabajando en tu “profesión” para un sueldo miserable, o comenzar desde cero en otro país limpiando piso, pero en cuatro meses ya tener hasta carro propio? ¡Ah, y con un amor verdadero! No de estos de hoy en día que no sacrifican nada, todo lo quieren fácil, ¡por eso estamos como estamos! El hecho que me vaya a Francia o a España no dice nada, ¡qué lo diga el amor! Todo puede suceder en la vida, incluso, que me quede llorando en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía, melancólico, perdiendo el vuelo a una nueva vida, sólo por miedo, o lo que significa en realidad ser venezolano, ¿lo sabes? Ir a la playa, tomar los viernes cerveza, rumbear, luchar contra la delincuencia, ayudar al que se desmayó en el Metro de Caracas, mentarle la madre al mal parido por la autopista Valle Coche, o conocer a una chica bonita en el kilómetro 50 de Choroní, en la enorme piedra, o amar a la gente de pueblo de Chichiriviche… ¿Lo cambias por una nueva vida? Tranquila, donde sólo importas tú, y con quien estés, que puedas trabajar honradamente, alquilar un buen sitio, al poco tiempo la inicial para un automóvil, y caminar tranquilo por las calles, además de despreocuparte por un nuevo hueco en tu urbanización. Creo que es el único obstáculo: la gente. Estamos acostumbrados a la zalamería, a ser más salidos que una gaveta, pero vale la pena, porque es preferible vivir de verdad, que sobrevivir en un país amamos, pero no nos ofrece lo que merecemos como ciudadanos.
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Hay que pensarlo muy bien, antes de tomar una decisión de semejante calibre, pero, como para todo en la vida tiene un norma y un derecho, acepto la responsabilidad que me toca, como es votar, tener un pasaporte y derecho a trabajar en otro país, ¡ciudadanía real, no maquillada! Aquí juré amar a Venezuela cuando nací, pero ahora prometeré con toda mi lealtad que renunciaré a otros países, que defenderé las leyes de Francia, que ahí estaré cuando me necesiten, porque sí me ofrecen lo que siempre quise, y que nunca me ofrecieron en mi país, y luchando fervientemente, día a día, preparándome como ser humano, aportando talento, mas, en balde fue… ¡Adiós, Venezuela! Te quise, de verdad, te quise, pero no hay vuelta atrás, y, por mucho que deje recuerdos de mi vida en tu tierra, descubrí lo que soy, tarde, pero seguro, tan firme como que me llamo Frank Nessi Contreras. ¡Libérate! Glogló… ¡Voló! ¡Mermó! ¡Murió!
(-.-) REFLECTIONS BY THE TEA (-.-)
Ciudadano ¿qué?
Je renonce à mon pays parce que je l'aime et ne peux pas vivre au Venezuela. Est-ce un péché? Je suis conscient de ce qui se fait aujourd'hui. Au revoir, au Venezuela! Es lo que siempre he recalcado en mis semanarios, que para adelante, es para allá… Ahora bien, ¿qué debo reflexionar? Nada, simplemente, porque todo está dicho. Los venezolanos son masoquistas, y, en todos los ámbitos, por ejemplo, ahora en el Mundial Brasil 2014, las camisetas de Brasil y Argentina abundan, y, ni siquiera saben que cuando pisamos esas tierras, nos llaman basura, por decir algo, y que jamás llegaremos a ser buenos futbolistas, por andar aupando a otros países, ¿qué tal? Y, no es para menos, porque en las eliminatorias nos emburran, no llegamos a su nivel, ¿y de remate vamos a ir por ellos? Prefiero ir a Holanda, Inglaterra o Camerún, y no por rebelde, sino por tener la razón.
Nicolás Hedor lo dijo perfectamente: “A los países suramericanos se les tiene un especial afecto, pero cuando la Vinotinto va a esos lugares no nos quieren, nos dicen de todo y se burlan porque aquí nos ponemos sus camisetas”, ¿entonces? ¿Somos o no somos masoquistas? Es sólo una muestra de lo que somos, por ello, prefiero obtener mi ciudadanía, aguantar años en residencia continua, trabajando honradamente, tener presencia física en ese país y representar el nivel moral que debe tener cualquier ciudadano, cosa que en Venezuela no ocurre, porque hacen lo que les da la gana, porque lo que hacen es pedir al Gobierno, cuando ellos son los mismos causantes de las tragedias, por ejemplo, los de “mente marginal”, que echan la basura a las quebradas, y después salen con la cara bien lavada a exigir que le hagan limpieza a las quebradas por las lluvias, o aquellas familias que invaden a granel, con cinco muchachos encima, y la madre en cuestión sólo tiene 23 años, ¿así quieren seguir viviendo? ¡Qué va! Si tengo que darme a pulmón con el inglés, me lo doy, si tengo que chispearme, me chipeo, si tengo que estar en lista de espera para ser elegible, lo hago, total, ¿qué pierdo? Me tocará ahorrar dinero y tiempo para ser ciudadano estadounidense, ¿cuántos años? No sé, los que sean necesarios, porque cinco años en una empresa, cuatro en otro, en Venezuela, ¿y tengo que vivir como viene? ¿Acaso hay opciones de superarse? Así sea profesional, o, según, tenga buenos ingresos, ¿puedo comprarme un automóvil? ¿Pedir préstamos impagables? ¿Y para que me lo roben en cualquier esquina? ¿Seré otro caso de homicidio que termine en la Morgue de Bello Monte? ¡Qué va! Prefiero mis años viviendo en aquellos lares, y ser respetado, que ser venezolano de por vida, y morir sin que nadie lo sepa, o sí, en unos 4 ó 5 días, que aparezca en la página de sucesos (amarillista). Soy Cristiano, no pendejo.
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Necesitaría fotos, una constancia de trabajo y otros documentos de residencia, además de mis huellas digitales y mis antecedentes criminales, tipo CSI, pero válido, porque tampoco deben aceptar a cualquier escoria, sino a alguien que verdaderamente aporte a la comunidad, no las misiones enclenques y escuálidas de éste país muy mío, pero tan destruido. Como siempre recalco, debemos tener metas en la vida, normas que cumplir, alcanzar lo que se quiere en realidad, y no vivir de sueños; si tengo que ser hábil en el otro idioma, lo que es leer, escribir y hablarlo, pues, ¿qué me detiene? ¿Acaso no tenemos que conocer nuestra historia? ¿De Venezuela? Aquí cada persona le coloca los acentos a su gusto, retiene lo que le da la gana y no educa como debe ser, ¡es así! Nos quedamos en pañales con la verdadera historia de Simón Bolívar, o nos fastidia, debe ser por el líder político que tenemos desde hace unos años, que pretende desfigurar su imagen con su maldito socialismo. ¡Ah! Y si me eliminan el semanario, o sancionan por escribir estas letras, pues, ¿qué importa? Sería otra gota más del socialismo bonito en el que vivimos.
¿Me pondré a llorar después? Esperaré es la ceremonia que deseo, ¡casarme, ser feliz, y estar en paz! Tomaré, lo juro, mi lealtad, y, desde ese momento, sabré lo que soy, porque ciudadano venezolano, no me siento, sino en alquiler de vida. Necesito cariño, entusiasmo, amor de compañeros, amor romántico, amor apasionado, amor consumado. Aquí no lo encontraré, porque todo gira alrededor de lo que tienes, de cómo eres físicamente, de tener un carro, casas de playa, etcétera; lo digo porque lo he vivido, y no sé si seguiré viviendo. No voy a andar con una mujer por sus tetas o su cuerpo, sea popular, o sea la más sexual de todas, ¡para eso contrato a una prostituta, si tengo dinero! ¡Para eso sigo siendo el sifrino que fui, y como mierda como todo el mundo! Disfruto de la playa, la montaña, mis amigos (contados con los dedos), la familia que me queda, ¡y ya! Conozco a personas de alta gerencia, y se la dan de la gran cosa, y no saben ni redactar, todo por portar un carnet de una de las empresas más importantes del país, ¿y qué haces con eso?, ¡ay, sí! Trabajo en el Grupo Últimas Noticias (Cadena Capriles) Me enorgullezco, ¡bah! Soy otro mortal, soy otro obrero, así que si me pongo a vender pastelitos en mi carro, o tener mi oficina en la empresa, daría lo mismo, bueno, creo que vender pastelitos traería más dividendos a mi vida, pero, bueno, así fuimos educados, y nos podriremos con esa mentalidad mediocre de lo que somos, del racismo y clasismo, que supuestamente no existe en Venezuela, ¿quién te metió ese mojón en la cabeza? Por muy abierto y naturales que parezcamos, somos todo eso y más, sólo que la hipocresía abunda, el sexo ni hablar, y, para ello, la muestra de tu vida y lo que has experimentado, que ha sido para madurar, pero, a la hora del té, no vas a aprender nada, ni a aprehenderte de esta sociedad del coño donde nos llenamos de ínfulas podridas, creyendo ser felices, y terminamos con un epitafio así: “nació en Venezuela, y murió en Venezuela. No fue nadie en la vida, sólo uno más en el coto”.
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Si quieres regalarle algo especial a la persona que más amas en tu vida, lo perfecto está en la ceremonia de bodas, ¿cómo es la cosa? Ja, ja, ja. Si piensas que no tiene nada que ver con el tema, estás errada, porque si pensamos bien, todos dan el bendito corneteo: “tá, tá… tá, tá, tá (bis)”, ¿eso te hace feliz? Prefiero una cena de ensayo, ¡qué tradición tan bella! Un buen cortejo para el novio, muchas flores a la novia en un lugar especial de los dos, y que los anillos sean únicos, no que sean de oro, o como ya los conocen, sino que sean algo muy de ellos, del material que sea, pero que se sientan únicos y verdaderos, como los esposos que serán, y no andar pariendo muchachos, típica costumbre venezolana, cual acures… Prefiero que a mi dama le regalen joyas que usará en el vestido, desde luego Cristianos, el que ella quiera, no tiene que ser de gala. También que estructure bien sus votos en la fiesta del matrimonio, y un detalle mínimo para recordar ese día, luego de los votos, y, desde luego, cada tres años se renueven, y se haga una fiesta íntima. Yo, sinceramente, haré mis votos con regularidad, porque soy Cristiano, porque siempre hablo con Jesucristo. ¡Así es, y punto! Prefiero ser único, con mi mujer única, que regalar el dinero a las hienas que son los invitados de ceremonias lujosas, ¡porque eso es lo que son! Dios, ¿y qué tiene que ver todo esto con decirle adiós a Venezuela? Pues, porque más que ser ciudadano, quiero es mi felicidad plena, así que no me interesa qué nacionalidad diga la cédula, yo siempre seré Frank Nessi Contreras, un ciudadano más del mundo.
No me voy a casar por casarme, sino porque amo de verdad, no me voy a ir de Venezuela porque me picó el decúbito, o porque odie a Chávez, Maduro, Radonski, ¡no! No soy de esos aficionados a la política, por ende, me va y me viene si se va o no se va, si RCTV salió del aire o si la Polar muere porque dejará de producir Harina Pan, ¡ya con no comer arepas tengo por la escasez! ¡Eso es lo que hay! Por mí que cierren Globovisión de una vez, pues, ¡también son una mierda, pese a su cambio de directiva! Por eso, recalco, prefiero presentar a tiempo mis declaraciones tributarias, no manejar ebrio, no tener hijos sin haberme casado, ocultar que alguna vez fumé cigarrillos, ¿acaso cuesta mucho acoplarse a las normas? Los venezolanos no se respetan ni a sí mismo, y, si te pica, pues, ráscate, si dices que manejas perfectamente ingiriendo licor, ese es tu problema, y si me llamas a mi madre por estas letras, o cualquiera de las anteriores, no me llegarán, así sean por el Skype, que no uso, sino explícito, porque, simplemente, te duele, así que ve al espejo, desnúdate, y pregúntate: “¿será que soy una Prostituta Social, o mi naturaleza es auténtica, única?”.
¿Será costoso mi naturalización? ¡No! Nada es costoso cuando se trata del amor, de tu felicidad... ¿Qué no es costoso en esta vida? Para eso hay que organizarse, ahorrar, no gastar en estupideces, pensar siempre en lo material, en las lolas o lo que fuere, ¡hay que hacer prioridades! Nadie las hace aquí, apenas y los viernes irse de rumba, tomar cerveza o cobrar y gastarlo el mismo fin de semana en la playa, ¡qué patético! Por eso, repito, prefiero tener una educación cívica de verdad, no ficticia, por eso prefiero luchar y luchar, porque para eso nacimos, fuere donde fuere, y, cuando ya tengas buen uso de la razón, saber cuál es tu nacionalidad. Nacer en un país, para mí, no dice nada, sino en lo que creas como hombre. La lucha es continua, la felicidad es única, y, si uno está feliz, valga la redundancia, además de conforme y satisfecho, nunca dejarás de bregar por lo que eres realmente, sin tangentes, como aquí en Venezuela, por ejemplo, en una relación, que, dices que sí hoy, y mañana andas con otro tipo…
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Nunca dejaré de escribir, pues, eso soy, lo que sí no sé es si cambiaré mi nombre, ¡ya el tiempo lo dirá! Dudo mucho que lo cambie, pero todo es posible en esta vida, y, será en la Corte del Distrito o como se llame, ja, ja, ja, luego de ser quien soy, lo que seré, sienta y sepa, ¡lo sabré! Claro, está la opción de doble ciudadanía, pero, ya saben cómo es Venezuela, más si tienes contactos importantes, ja, ja, ja. No será una decisión difícil, sinceramente, si me quedo con mi nacionalidad de raíz, o la que quiero, ¿se dan cuenta? En tal caso, me daré un paseo por la Embajada, pero, mientras tanto, giro y giro, no deliro, y al suelo me tiro… para que sepas lo humano que soy, y, si no te gustó lo que escribí, recuerda, soy vate, no el hombre que crees… Esto es El Literato, no lo que tú digas, si te gusta, pues, bienvenida, y si no, también.
Frank Nessi Contreras
¿Quiéres irte por esto?
(£,£) PERISTILO SÓRDIDO (£,£)
Nuestro país
A mi edad, tendría como 5 hijos, si me diera la puta gana, bueno, en realidad tendría uno de 10, pero abortó naturalmente. Sí, es mi vida, ¿te molesta? ¿Te causa gracia? ¿Quieres saber la historia? ¡Me vale! El punto es que a mis 34 años de edad no me he casado, no tengo hijos, y no es porque sea introvertido o asocial, ¡mejor conóceme, luego hablamos! Simplemente, siempre fui maduro, y no de pene suelto o mujeriego, aunque, bueno, disfruté mi adolescencia a granel, he vivido que jode, pero, no ando alardeando, ni tampoco dándomelas del más bribón, o el estúpido romántico que cree en el amor. Soy Frank Nessi, sólo eso; que quieran tacharme de único, diferente, especial, paño de lágrimas, buen amigo, psicólogo, sexólogo y hasta buen amante, queda ahí. La cuestión está en ser conciente de la vida, de enamorarse de verdad y no dar de cuca suelta, ¿qué te honra tener a tus hijos? Sí, te creo; para cualquier madre es una bendición, pero ese no es el enfoque, sino el pan nuestro de cada día en nuestro país. A mi edad, las mujeres, ya lucen viejas, ¡es la verdad! Si te arde, échate polvito, o dale otro polvo a tu pareja de turno, y así pares a tu quinto muchacho…
A mi edad, ya nada me sorprende, ni siquiera que me insultes, es pan de cada día. El punto es que Venezuela está perdida. De cinco jóvenes, tres acuden al ginecólogo después de tener una vida sexual activa, ¿se imaginan? Para colmo, la mayoría, el 60%, ya están embarazadas o presentan una enfermedad infecciosa en sus genitales. ¿Te gusta mucho el sexo, sí? ¡Cuídate! Es sólo eso, cuidarse, no pensar con la vagina o el pene, ¡madura, plástica o marginal social! Cualquier persona inteligente, va a su primera cita ginecológica después de su ciclo menstrual, ya que el especialista podrá decirle, sin tapujos, cualquier cosa que le pregunte, tenga 9 ó 12 años. No entiendo el porqué le tienen miedo al médico, que si la mamá o el papá se entera que tienen una vida sexual, pero, sí tienen el valor de decir: “mamá, estoy embarazada”, con 13 años de edad, o menos, ¿ahora sí no te da miedo, verdad? Para colmo, paren, se “enamoran” otra vez, y otra barriga, mija, ¿acaso no aprendes? No están pendientes de los cambios que pueda desarrollar su cuerpo, además de la sexualidad, ¡prefieren vivirlo sin conocimiento de causa! Ay, sí, qué divino, ya eres mujer porque tiraste, ¡te felicito! ¿Estoy siendo muy rudo? No creo, es la verdad.
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Hoy en día, hasta la Ley Orgánica de la Protección del nino, niña y adolescente (Lopna), expresa que cualquier adolescente mayor de catorce años puede obtener información acerca del tema, sin que sus padres estén presentes, ¿acaso lo sabías? No sé, pero lo real del caso es que no existe una orientación sexual en ningún sentido, también los padres que temen hablarle de sexo a los niños, ¿cuál es el problema? Se tiene ese mojón mental que tus niños no crecen nunca, que serán tus terruños, y, cuando vas a ver, aparece el embarazo precoz, una enfermedad venérea, y dice: “mi niña se hizo mujer, y no me di cuenta”. Por eso es que vemos a tantos niños los sábados y domingos en el Metro de Caracas, o en algún parque, y a “niñas” como madres, que lo que invoca es lástima, y no de forma despectiva, sino el porqué no se cuidan, si el sexo es el sexo, si hacer el amor es hacer el amor, no está prohibido, aunque, bueno, yo ligaría a aquellas mujeres mejores de 25 años que tengan 3 hijos, o legalizaría el aborto a zagales de 14 – 17 años que ya tuvieron un hijo, ¿estoy loco? No creo, porque el Sida no es juego de niños, además, no se trata explícitamente de relaciones sexuales, sino aquellas enfermedades que se contraen por humedad en la ropa interior, en baños públicos e incluso piscinas; es por ello que se debe ir a un ginecólogo, una vez a la niña le llegue la menstruación, porque siendo vírgenes pueden contraer sífilis, papiloma humano, clamidia, tricomoniasis o candidiasis, y sólo por intercambiar ropa interior, trajes de baño e incluso pantalones con otras amigas. ¿Qué será de Venezuela entonces dentro de cinco años? ¿Parirán a los diez años? ¿A los ocho? Y después me dicen que estoy loco, que ya una chica de 16 años es una mujer, a los 20 con postgrado y a los 30 ni se diga… ¿Qué opinas? ¿Eres una santa, ocultas lo que eres, o de verdad te dieron una buena educación sexual romántica? Esto es El Escalpelo, no lo que tú digas, si te gusta, pues, bienvenida, y si no, también.
Sin cernejas en la sin hueso:
Frank Nessi
VUELCO DE BROZA
Adiós
Puedes cambiar tu mundo
en un segundo
pero seguirás viviendo en tu burbuja
que no se explotará ni con mis letras de agujas.
Por eso mi padre es el cielo
mi madre la arena
quien el pene no entierro
en una bella nena
porque creo en el amor.
Si es de irme, me voy
si es de enamorarme, lo dejo todo
sin pensar en lo material o lo cosechado
si soy profesional,
que tanto me jodí en el lodo.
No me importa, porque soy un enamorado
de la vida.
No me callo, no me reprimo
Escribo, y eso es lo que me gusta
sin pensar si te gusta, o no te gusta.
Muchos me ven como el hombre perfecto
que tengo alto intelecto
que anda solo sin razón
tan bello que soy del corazón
y hasta apuesto...
¿De que me sirve ese talento
de conformarme con una mujerzuela?
Ese no soy, es un absurdo,
por eso le digo adiós a Venezuela.
No estoy para felicitaciones, sino para acciones,
no soy de tanto escribir, sino del buen vivir,
no estoy para que me den las gracias, ni andar en pretensiones,
que soy uno en mil.
Si continúo en este país que se cae,
lleno de decepciones,
sólo seguiré soñando despierto
perdiendo hasta el día de mi muerte, el aliento.
Me cansé de sobrevivir, no de escribir,
me cansé de aconsejar, porque sólo saben es aprovechar,
me cansé de la misma gente que dice y nunca hace
de calarme indigentes y buhoneros en el Metro.
Prefiero dejar guindada mi licenciatura
y servirle café a un francés,
prefiero hablar inglés
y ver bellos pies
que tener esperanza en esta mujer Venezuela
que cada día se ahoga
y no se aflora
donde sólo importa tener dinero
un automóvil
de reunir por 9 meses para comprarme un móvil
y venga un desgraciado a robarlo
o caminar hipocondríaco por las calles de Caracas,
o encerrado entre cuatro paredes pasando la resaca.
No me voy, ya me fui, y no vendré,
porque, sinceramente, me cansé,
Del embarazo precoz, del segundo mundo,
de calarme a quien se la da de más, y nada tiene,
pues lo que importa es el verde…
¡Adiós, Venezuela!
Te quise,
no lo niego,
pero es mi vida, la única que tengo,
así que por ti, sinceramente, ya no vengo,
el amor que sentía por ti, ya no retengo,
ni retendré,
porque mis pies, bien lejos están de ti,
luché y luché, y nunca fui feliz,
así que te dejo, dejando un talento,
ese que caminó, corrió, y murió en el intento.
¡Adiós, Venezuela!
Esto es El Escalpelo,
no lo que tú digas, si te gusta,
si te disgusta,
bienvenida siempre serás, pero en escritura,
así me curo de males, mujerzuela Venezuela,
y no me sigo calando tus maltratos, racismos y amargura.
Frank Nessi
… Y como dirían en mi villorrio:
“No hay vuelta atrás”.
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(Si quieres regresarte como el chivo, ese es tu peo)
La intención de esta página es dejar algunas de las historias que colapsan mi cabeza, un espacio para drenar tan sólo un poco mi memoria cerebral. El Literato.
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